Aquí me tenéis de nuevo, con una nueva entrada de una reseña, sobre uno de los elementos más importantes en mi cuidado facial diario.
Quizás, alguna de vosotras ya lo utilicéis al igual que yo, pero para las que aún no lo conozcan, os lo enseño encantada.
Se trata del cepillo de limpieza facial Sirius Sonic Skincare. Y si lo quieres conocer más a fondo......
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DESCRIPCION DEL PRODUCTO
El cepillo facial Sirius Sonic Skincare, es un cepillo eléctrico, especialmente indicado para utilizar a diario y completar el cuidado y limpieza habitual de nuestro rostro.
Su funcionamiento es a través de frecuencias sonoras de vibración, llegando a las 300 movimientos por segundo, descartando el sistema rotatorio o giratorio que otros aparatos de similares características.
Tiene una forma ergonómica y cómoda en su utilización, funciona a pilas y está totalmente preparado para utilizar bajo el agua.
El kit también dispone de una base, que facilita el almacenaje de la estructura del cepillo, para mantenerlo de forma vertical en cualquier estante.
Sus diferentes cabezales, de fácil colocación, hacen que se pueda utilizar de manera indistinta en cualquiera de las fases de nuestra limpieza facial.
Contiene estos 5 cabezales y su indicaciones son las siguientes:MODO DE EMPLEO
El cepillo se puede utilizar tanto como desmaquillante, limpieza diaria o profunda.
El fabricante permite su utilización hasta dos veces al día y se utiliza realizando pequeños movimientos circulares, evitando el contorno de los ojos y sin presionar demasiado.
La marca recomienda su aplicación durante 50 segundos, de los cuáles 20 segundos serían en la zona de la frente y 10 segundos en nariz, mejillas y barbilla.
Cada cabezal está destinado a una función, según el tipo de piel o necesidades de cada persona.
- CABEZAL NORMAL: especificado para limpieza diaria de las pieles normales.
- CABEZAL SENSIBLE: igual que el anterior, pero con las cerdas más blandas, indicado para pieles sensibles.
- CABEZALES HIDRANTE Y EXFOLIANTE: son totalmente iguales y están hechos de esponja de látex, para aplicar productos en crema y para facilitar exfoliaciones faciales.
- CABEZAL TONIFICANTE: de plástico duro con cuatro protuberancias que sirven para dar un masaje final en el rostro y así conseguir una mejor absorción de la hidratante, serums, esencias y demás productos faciales que nos apliquemos.
Sólo puedo decir cosas buenas de este cepillo, convirtiéndose en un imprescindible para mí. Y aunque no utilizo todos los cabezales, estoy muy contenta porque lo estoy amortizando muchísimo, utilizándolo todas las noches (dos veces al día me parece excesivo).
Al desmaquillarme siempre tiro de él, porque me deja la piel limpia de verdad y me quita la suciedad con facilidad, sin tener que incidir demasiado ni presionar o irritarme la piel.
Sus pilas duran muchísimo, y su movimiento de vibración, un acierto total de la marca, alcanzando un nivel de limpieza óptimo sin dañar o agredir el rostro.
Su ergonomía, poder meterlo bajo el agua y la facilidad de poner y quitar los cabezales, le da puntos extra.
Os he dicho, que no utilizo todos los cabezales y es cierto.
Suelo utilizar 2 de los 5 cabezales. El cabezal para piel sensible es mi compañero diario, porque al tener sus cerdas tan blandas es muy moldeable y se adapta perfectamente a cualquier parte de mi rostro, sin irritar mi piel. Al contrario que el cabezal para pieles normales, que es demasiado fuerte para mí, pues sus cerdas son más duras y firmes.
El cabezal tonificante, lo utilizo en mis limpiezas faciales profundas para terminar con un masaje relajante muy agradable.
Y los cabezales para hidratantes y exfoliantes, no los utilizo porque se absorben todo el producto que me quiero aplicar y se quedan ellos con más producto que mi rostro.
En definitiva, decir que lo aconsejo 100% y que el hecho de utilizarlo a no utilizarlo se nota una barbaridad, y más cuando lo utilizas diariamente y lo dejas durante un tiempo, os aseguro que se nota muchísimo que la piel no está tan limpia y pura. Por eso, ya no puedo pasar sin él.